Investigadores de la Universidad Estatal de Carolina del Norte han desarrollado un software que les permite mapear entornos desconocidos, como edificios derrumbados, basándose en el movimiento de un enjambre de insectos ciborg o biobots.
La idea consiste en aprovechar el movimiento aleatorio de los BioBots -que podrían ser un enjambre de cucarachas equipados con sensores electrónicos- y su tamaño para explorar edificios derrumbados u otras estructuras de difícil acceso. Aunque no pueden ser rastreados por GPS para comunicarse con los investigadores envían señales de radio siempre que dos o más se encuentren uno cerca de otro.
Primero el enjambre se expande libremente por el edificio, una vez se ha expandido los investigadores podrían enviar señales de mando para que continúen moviéndose hasta encontrar una estructura intacta, como una pared y que la recorriesen.
Repitiendo este proceso varias veces el software utiliza los datos recolectados y mediante un algoritmo crea un mapa aproximado del entorno desconocido.
«Este sistema puede dar a los servicios de emergencia una buena idea de la distribución del área a explorar«, dice Edgar Lobaton, autor principal del artículo.
El software también permitirá a los organismos de seguridad determinar la ubicación de amenazas radioactivos o químicas, si los biobots son equipados con los sensores correspondientes.
Los investigadores han probado el software utilizando simulaciones por ordenador y actualmente están probando el programa con robots. Planean trabajar con el investigador Dr. Alper Bozkurt para probar el programa con biobots.
Fuente | Newsroom, NC State University